El futuro del Súper 14 está siendo discutido con fuerza entre las autoridades australianas, neozelandesas y sudafricanas que conforman la Sanzar. En Nueva Zelanda, el ambiente rugbístico se mostrado proclive a una jerarquización del certamen, observando con buenos ojos la llegada de nuevos equipos y también de nuevos jugadores.
Wellington (19/05/2009).- ¿Brian O’Driscoll junto a Ma’a Nonu en el mediocampo? En las últimas semanas, preguntas como esta han comenzado a reproducirse entre los diversos medios neozelandeses, debido a la incertidumbre que rodea actualmente al Súper 14.
Los conflictos en el seno de la Sanzar se originaron hace algún tiempo por las diferencias que sostienen los dirigentes de Australia y Nueva Zelanda con sus pares sudafricanos.
La Unión Australiana (ARU) y la Unión Neozelandesa (NZRU) coincidieron en la decisión de ampliar el calendario del Súper 14, evaluando con mucho interés la idea de abrir el cupo para nuevos equipos interesados en participar.
Esta propuesta, que ya venía barajándose con firmeza desde el año pasado, tomó mayor fuerza en los últimos meses, a raíz de la disminución de espectadores que pudo visualizarse en varias de las fechas disputadas.
En Sudáfrica, los ejecutivos de la SARFU señalaron que no están en contra de avalar una modificación en el número de planteles del Súper 14, pero sí se mostraron reacios a los cambios que dicha ampliación generaría en el fixture de la Currie Cup.
La SARFU sostiene que la estructura de la Currie Cup es la que le ha permitido a los Springboks ascender hasta la posición rugbística que hoy ocupan, y subrayó además que esta competencia local ha logrado generar mayores expectativas que el Súper 14, entre los aficionados de ese país.
En Australia y Nueva Zelanda, en cambio, consideran que el desarrollo del Súper 14 debe ser prioritario frente a cualquier certamen vernáculo, y ambos países entienden que la forma de lograr un mayor fortalecimiento de este torneo es promover el ingreso de nuevos equipos y naturalmente la llegada de nuevas figuras.
A favor de esta postura se mostró también el entrenador de los Hurricanes de Wellington, Colin Cooper, para quien el arribo de jugadores consagrados representará un paso valioso en la jerarquización del certamen:
“Creo que tenemos que actuar con mayor inteligencia y entender que una competencia como esta, que para nosotros es sin dudas la más exigente del mundo, podría incluso transformarse en algo aún más competitivo si estamos decididos a traer nuevos talentos”.
“Creo que esto no afectará en nada al desarrollo de figuras locales. Lo que debilitará al Súper 14 es la salida de los equipos sudafricanos, en el caso de que llegáramos a una situación como esa”.
Wellington (19/05/2009).- ¿Brian O’Driscoll junto a Ma’a Nonu en el mediocampo? En las últimas semanas, preguntas como esta han comenzado a reproducirse entre los diversos medios neozelandeses, debido a la incertidumbre que rodea actualmente al Súper 14.
Los conflictos en el seno de la Sanzar se originaron hace algún tiempo por las diferencias que sostienen los dirigentes de Australia y Nueva Zelanda con sus pares sudafricanos.
La Unión Australiana (ARU) y la Unión Neozelandesa (NZRU) coincidieron en la decisión de ampliar el calendario del Súper 14, evaluando con mucho interés la idea de abrir el cupo para nuevos equipos interesados en participar.
Esta propuesta, que ya venía barajándose con firmeza desde el año pasado, tomó mayor fuerza en los últimos meses, a raíz de la disminución de espectadores que pudo visualizarse en varias de las fechas disputadas.
En Sudáfrica, los ejecutivos de la SARFU señalaron que no están en contra de avalar una modificación en el número de planteles del Súper 14, pero sí se mostraron reacios a los cambios que dicha ampliación generaría en el fixture de la Currie Cup.
La SARFU sostiene que la estructura de la Currie Cup es la que le ha permitido a los Springboks ascender hasta la posición rugbística que hoy ocupan, y subrayó además que esta competencia local ha logrado generar mayores expectativas que el Súper 14, entre los aficionados de ese país.
En Australia y Nueva Zelanda, en cambio, consideran que el desarrollo del Súper 14 debe ser prioritario frente a cualquier certamen vernáculo, y ambos países entienden que la forma de lograr un mayor fortalecimiento de este torneo es promover el ingreso de nuevos equipos y naturalmente la llegada de nuevas figuras.
A favor de esta postura se mostró también el entrenador de los Hurricanes de Wellington, Colin Cooper, para quien el arribo de jugadores consagrados representará un paso valioso en la jerarquización del certamen:
“Creo que tenemos que actuar con mayor inteligencia y entender que una competencia como esta, que para nosotros es sin dudas la más exigente del mundo, podría incluso transformarse en algo aún más competitivo si estamos decididos a traer nuevos talentos”.
“Creo que esto no afectará en nada al desarrollo de figuras locales. Lo que debilitará al Súper 14 es la salida de los equipos sudafricanos, en el caso de que llegáramos a una situación como esa”.
